miércoles, 9 de diciembre de 2009

REFLEXION EVANGELICA DEL 1ER DIA DEL TRIDUO

. Ofrecemos hoy a nuestros hermanos que no hayan podido asistir la reflexión evangélica del 1º día del Triduo a Ntra. Sra. de Loreto. Corresponde al evangelio del día, texto de Lc 5,17-26, en el que se nos narra la curación de un paralítico, al que, por no poderse acercar a Jesús debido al gentío que le rodeaba, lo descuelgan en una camilla desde el tejado de la casa. El texto termina con la frase: “Hoy hemos visto cosas admirables.” Los hombres que buscaban respuesta a sus vidas descubren cómo Dios les responde, como al paralítico del evangelio. Hoy en nuestra vida, y cada día, Dios nos regala su gracia, su misericordia, su perdón; Dios se nos regala y eso es algo admirable. Ya el profeta Isaías anunciaba que algo grande iba a suceder: que el desvalido encontraría fuerza, que el ciego encontraría luz en el camino...; y así es, a todo débil le llega un momento de encuentro con Jesús y a partir de ahí todo cambia, se encuentra con una vida con sentido. Ante el hombre que sufre, Dios responde en Jesucristo. Con Jesús, se inicia pues la vida nueva para los que sufren. Jesús es la salvación y el sentido de nuestras vidas. Ante el paralítico que le acercan a Jesús, su primera reacción es perdonarle, Jesús sabe que su problema no es sólo estar postrado en una camilla, Jesús vislumbra que sufre en su corazón, dolorido quizás por la culpa, el rechazo..., por eso le perdona, para que en primer lugar se sienta acogido en su debilidad. Ser acogido, sentirse más humano, sentirse importante, ésa es la mejor noticia para el que se siente dolido en su vida. María, al igual que Jesús, sabía darse cuenta del sufrimiento, del dolor del ser humano. Intuye lo que hay en el corazón de las personas, no se queda sólo en el exterior. María es la mujer atenta, preocupada, que adivina la necesidad del hombre y actúa. María es la mujer fuerte que busca soluciones. Ella nos dejó el mejor consejo o atajo para llegar a Jesús: “haced lo que Él os diga” (como recomendó en las bodas de Caná). Ella es el camino de la esperanza, del que sabe que Dios siempre da respuesta. El mensaje que nos deja hoy es: mirar – descubrir – responder. Hemos de saber mirar a nuestro alrededor a los que nos necesitan, hemos de saber descubrir ya que no siempre estamos atentos a lo que pasa en el corazón de nuestros hermanos, y hemos de responder en consecuencia ofreciéndonos a los demás. Sigamos este mensaje de María, imitemos a María. -Ana Luisa Sánchez Glez. .

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias, Ana Luisa por esta gran labor para los que estamos fuera de Jerez en estas fechas y no podemos asistir.